Cada 4 años también me vuelvo experto del futbol

Si, resulta que Roberto se pinta banderas de países ajenos al suyo cada 4 años porque los mundiales de futbol son las únicas temporadas en las que me vuelvo un loco fanático de este deporte.. No tan loco.

¿Por qué?
No sé, desde pequeño me he emocionado por ello, por llenar los álbumes y gritar goooool cuando el equipo al que apoyo anota. Muy en el fondo siempre sueño con el día de celebrar un gol de Nicaragua en un mundial, mientras tanto, disfruto de lejos.

Esta es la temporada en la que si me dan ganas de reunirme a tapiniar y ver los partidos, de comentarlos en todo momento, de escribir de ellos en las redes sociales, de restregarle en la cara a los bros cuando sus equipos pierden, de grita cuando fallan... En fin, bien así me pongo.

Cada mundial es diferente, del 98 a penas y recuerdo, del de Corea Japón recuerdo haberme despertado por las madrugadas para ver los partidos, para el de Alemania el cabezazo de Zidane, en Sudáfrica el manotazo de Luis Suárez... Y así. 

Este año me ha tocado vivirlo desde otra situación, la oficina. Y es que pasé viendo y pensando en publicidad y datos futboleros todo el tiempo, en todos lados. Por lo que podría decir hasta cierto punto que medio me cansé, pero ya veremos mañana en esa inauguración cuando seguramente llore escuchando la hermosa canción de Pitbull y la maje de anaconda, y las semanas próximas donde vamos a tener tardes bastante divertidas y ver que tripeo me llevo de este mundial. 
¡HUMGER GAMES!

Y bueno, que de pronto me encuentro esta publicidad cuyo insight es precisamente este mi sentimiento de que cada 4 años todos sabemos de futbol.